Lo aprobó este jueves la Legislatura porteña. Son 12 predios, con los que esperan recaudar 168 millones de dólares.
La Legislatura porteña aprobó este jueves una ley para autorizar la venta de 12 terrenos públicos que el Gobierno nacional le cedió a la Ciudad. La idea es recaudar al menos US$ 168 millones y usar ese dinero para cancelar un crédito internacional que se tomó para construir el Paseo del Bajo. En tanto, algunos de esos predios se destinarán a la urbanización de la villa 31 de Retiro.
La norma fue sancionada con 41 votos a favor, de los bloques Vamos Juntos, Partido Socialista, Evolución y Mejor Ciudad. En contra votaron el kirchnerismo, el peronismo y los bloques de la izquierda.
Se trata de 12 predios muy distintos. Por un lado está parte del Mercado de Hacienda de Mataderos, que será trasladado a Cañuelas. En su ubicación actual se llevará adelante un proyecto urbanístico, que incluirá un polo gastronómico e instalaciones para la feria gauchesca que se realiza los domingos, pero también la venta de algunas parcelas para la construcción de edificios.
Otro lote es una vieja edificación del ferrocarril que está en Corrientes y Dorrego.
Pero el núcleo principal de la ley son un grupo de terrenos que están dentro de la villa 31. Entre otros, el predio que ocupa un supermercado y galpones que usan empresas que operan en la terminal de micros de Retiro. Esos predios serán vendidos y se los destinará a la construcción de comercios, viviendas y servicios, dentro del marco de urbanización que se votó para el futuro barrio.
Otro grupo de predios dentro del asentamiento son los que se conocen como «el macizo». Son parcelas que hoy están ocupadas, y que no serán vendidas a privados sino que se las transfirió la Nación a la Ciudad para que pudieran firmarse las escrituras de las futuras viviendas de los vecinos del barrio.
“Las megaobras que están transformando nuestra ciudad y que implican indiscutidos beneficios para nuestros vecinos, tienen costos elevados que afrontamos en parte con el producido de estos inmuebles transferidos por el Estado nacional. Estamos convirtiendo activos que pertenecían a otra jurisdicción, en otros de mayor utilidad social y urbana para nuestra Ciudad», afirmó Agustín Forchieri, presidente del bloque Vamos Juntos.
En cambio, el argumento principal de la oposición fue que se trata de un negocio inmobiliario, postura que también sostuvieron los vecinos que se acercaron a protestar a la Legislatura durante la sesión.
El préstamo de US$ 168 millones que se debe cancelar fue otorgado por la Corporación Andina de Fomento. En realidad, fue un crédito de US$ 400 millones que tomó el Gobierno nacional y había comenzado a pagar. Pero en el marco del ajuste del déficit fiscal, la Nación decidió transferirle el préstamo a la Ciudad y así bajar su exposición de deuda. Como compensación, le cedió los 12 predios a vender.
El Paseo del Bajo costará US$ 672 millones. Además de esos US$ 400 millones del préstamo, la otra fuente de financiamiento fue, también, la venta de terrenos públicos. Puntualmente, el playón ferroviario de Retiro que está detrás de Catalinas, que fue rematado por partes por más de US$ 369 millones. En ese lugar se podrán construir torres de oficinas y residencias.
Por otra parte, la Legislatura también aprobó el convenio que el Gobierno porteño firmó con la Nación para que le transfieran el control de las concesionarias Edenor y Edesur, obligación que compartirá con el Gobierno de la Provincia de Buenos Aires. Para que ese convenio se vuelva operativo, falta que la gobernadora María Eugenia Vidal firme un decreto, lo que sucedería antes de fin de mes. En el caso de la Ciudad, supone destinar $ 1.000 millones para sostener la tarifa social.
Por último, los diputados porteños también sancionaron una ley para permitirle al Ejecutivo tomar un préstamo por US$ 72 millones para construir la nueva sede del Ministerio de Economía y de la Agencia Gubernamental de Ingresos Públicos (AGIP) en el sitio donde estaba la ex cárcel de Caseros, en Parque Patricios.
Fuente: Clarin