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Por primera vez, devuelven peajes porque no se pudo usar una autopista

El domingo, la avenida Cantilo quedó cerrada porque se rompió un caño de AySA. A los que habían pagado antes al pasar por la Illia les devolverán el importe. Cómo saber a quién le corresponde.

La modernización del sistema de peajes en la Ciudad tiene una impensada consecuencia favorable para los usuarios. Por primera vez, a los automovilistas que no pudieron usar una autopista después de haber pagado el pase les devolverán el dinero, directamente a su cuenta.

Será para 4.166 vehículos que el domingo pasaron por la autopista Illia sentido a Provincia, entre las 9.20 y las 13.40. ¿Qué pasó? Que al avanzar se toparon con que la avenida Cantilo estaba intransitable por la rotura de un caño, con lo cual fueron desviados.

Todo comenzó en la mañana del domingo, cuando se rompió una cañería maestra de agua de AySA, en la Cantilo a la altura del Parque Norte. Esto obligó a cortar el tránsito que iba hacia la General Paz y a sacar a los vehículos por la bajada de Sarmiento.

El tema es que los 4.166 vehículos ya habían pasado por el arco de cobro con Telepase, por lo tanto les habían debitado el costo del peaje: $ 903,33 si pasaron antes del inicio de la hora pico (los domingos es de 11 a 17 mano Provincia) o $ 1.277,44 para quienes circularon durante la franja horaria de más demanda. Desde hace un año, las cabinas de peaje fueron eliminadas y todos los usuarios deben abonar con Telepase: el 93% de los automovilistas que usan las autopistas porteñas ya lo tiene.

Dado que el domingo esos conductores que pagaron no pudieron usar todo el tramo, la empresa AUSA, concesionaria de las red de autopistas porteñas, decidió devolverles el dinero a los usuarios.

La gente no debe hacer ningún trámite. El que tenga su Telepase vinculado a una tarjeta de crédito o débito verá directamente cargada allí la bonificación. En tanto, si pagan mediante la app Mercado Pago, verán el monto acreditado en su cuenta. Para seguir el reintegro se puede ingresar a telepase.com.ar/login, o entrar en este link.

Si bien el mismo domingo ya se había logrado parcialmente ordenar el tránsito, el panorama sigue complejo en la Cantilo, porque la reparación de los daños demorará “al menos una semana más”, contaron en AUSA. En estos días, Cantilo cuenta con dos carriles izquierdos habilitados, pero están cerrados los derechos y la banquina. Los desvíos actuales son:

  • Cierre de Paseo del Bajo sentido Norte altura Retiro.
  • El tránsito (liviano y pesado) proveniente de la Costanera podrá ingresar en Parque Norte.

Este reintegro marca un buen precendente para los vecinos y usuarios de autopistas, porque permitiría reclamos futuros en casos similares. Hasta ahora, los peajes no se habían devuelto nunca, en gran parte porque con el sistema manual era inviable hacerlo. La automatización y digitalización del cobro permite identificar a los usuarios.

Las únicas veces en que no se cobraba peajes era cuando se formaban filas demasiado largas en las cabinas y, bocinazos mediante, los operarios tenían que levantar las barreras para desagotar el tránsito.

Otro antecedente fue durante el pico de la cuarentena por el Covid, cuando no se cobraban los peajes para favorecer que la gente viajara en sus autos y no usara el transporte público, con mayor riesgo de contagio.

El sistema de peajes automáticos sin cabinas, conocido como “Free Flow” se empezó a usar en la Ciudad en el ingreso de Sarmiento y Salguero, sentido General Paz, en 2018, también en la autopista Illia. Más tarde se aplicó también en el Paseo del Bajo, inaugurado en 2019, aunque esta vía solamente es usada por micros y camiones. El año pasado se completó el resto de la Illia, y este año se sacaron algunas de las cabinas en los peajes de Parque Avellaneda.

El pórtico metálico sirve de soporte para un sistema de cámaras que detectan tanto la oblea del Telepase como la patente del vehículo, y así lo identifica para debitar el pago del peaje.

Quienes circulen por la autopista tienen la obligatoriedad de contar con el Telepase. Desde el 1° de mayo, el usuario que pase sin contar con el dispositivo es pasible de multa por evasión de pago: la sanción es de $ 70.708,50.

Pese al conflicto judicial, confirman que el subte vuelve a aumentar este sábado: a cuánto se va

Una jueza le ordenó a la Ciudad que presente un cuadro tarifario menor o le suspenderá todos los aumentos, incluso el que corre hace dos semanas. Pero el Gobierno apeló y mantiene su plan.

“Sí, el aumento del sábado sigue en pie”. Con esa frase simple y concreta, Subterráneos de Buenos Aires (SBASE, la empresa estatal porteña que controla el servicio) le confirmó a Clarín que desde este sábado 1° de junio el subte subirá de $ 574 a $ 650. Explicado así, no debería sorprender a nadie, porque fue lo que el propio Gobierno porteño adelantó cuando anunció que se venía una triple suba de la tarifa. Pero en el medio pasó algo: la jueza Elena Liberatori le dio 5 días hábiles a la Ciudad para reducir los incrementos anunciados, a riesgo de que le suspenda todas las subas y volver al boleto de $125.

El aumento del sábado “sigue en pie” porque el Gobierno porteño, a través de su Procuración General, apeló la decisión judicial y seguirá adelante con el cuadro tarifario y sus incrementos tal como los anunció en marzo.

Así, a la suba de este sábado se le agregará otra, el 1° de agosto, que llevará el boleto a $ 757.

¿Y los 5 días de Liberatori? Allí está el misterio. ¿Qué sucederá antes: se cumplirá el plazo dispuesto por la jueza o la Cámara de Apelaciones tomará alguna decisión (en tiempo récord)? Recién se sabría a mediados de la próxima semana.

Si la jueza ejecuta lo que anunció, debería suspender todo el cuadro tarifario y retrotraer el boleto a los $ 125 que costaba hasta el jueves 16, cuando comenzó a regir el primer aumento.

De haber una resolución de la Cámara de Apelaciones, habrá que ver si es a favor de la jueza o del Gobierno porteño.

Lo que sí está claro es que desde el sábado y por al menos un par de días, el subte subirá a $ 650, tras haber sufrido cuatro incrementos el año pasado más el de este año.

Para SBASE, la justificación tiene que ver con compensar los costos al alza que empuja la inflación, desde salarios hasta mantenimiento, y también para reducir el peso del subsidio en el boleto.

Según informó la empresa estatal, hoy la tarifa técnica del subte es $ 809,57. El número surge de dividir los costos operativos por la cantidad de viajes pagos que se hacen. Es decir, es lo que debería valer el boleto sin subsidio.

Pero el subte tiene fuentes de subsidio propias que fueron creadas en 2012, cuando la Nación le transfirió a la Ciudad el control de la red. En ese momento se votó una ley que determinó que una parte de lo que se paga en los peajes de las autopistas porteñas, un porcentaje de las Patentes de los autos de alta gama y una porción de lo que se abona en concepto de Sellos en los contratos entre privados se transfiera al Fondo Subte, cuya única finalidad es subsidiar la tarifa.

El tema es que la inflación fue alzando tanto los costos que ese subsidio quedó corto. Con un boleto a $ 125 se cubría un 85% de la tarifa real; con el boleto en $ 757 como se espera para agosto, se cubriría un 9% (aunque el monto de la tarifa técnica también subiría).

Además, la tarifa quedaría más en línea con lo que se cobra en dólares en los Metro de otras ciudades. Claro que acá los sueldos son en pesos y con una inflación de las más altas del mundo.

Aún con esta suba y la que viene en agosto, y tal como hoy, se mantendrá el esquema de descuentos para los pasajeros frecuentes. Esto es una quita del 20% para quienes viajen hasta 20 veces al mes; 30% para quienes lo hagan 30 veces; y 40% para los que viajen 40 veces. Además, se mantendrá la tarifa social o el abono gratuito, según corresponda, para empleadas domésticas, jubilados, estudiantes, docentes y ex combatientes, entre otros.

Volviendo a la causa judicial, los 5 días hábiles se cumplirán el martes. Se verá entonces si Liberatori retrotrae los aumentos al cuadro que regía hasta el 16 de abril. Su fallo es claro: le dio el plazo a la Ciudad para que establezca una tarifa “justa y razonable”, y caso contrario suspenderá “lisa y llanamente” la resolución de SBASE que disparó los aumentos.

La causa fue iniciada por la diputada nacional Myriam Bregman, los legisladores porteños Patricio del Corro y Alejandrina Barry, y el metrodelegado de la línea B Claudio Dellecarbonara, todos dirigentes del PTS-FIT. Argumentan que la tarifa técnica fue fijada sin precisión y presentada en una audiencia pública en la que no se tuvieron en cuenta objeciones planteadas

Fuente Clarin

El lunes se quedó un tren y los usuarios salieron por las vías

En las redes sociales, una pasajera sintetizó la sensación de muchas personas se mueven a diario bajo la tierra: «El subte de la Ciudad de Buenos Aires no tiene usuarios, tiene víctimas». Por un rato, a la odisea de viajar en la línea D -con demoras y frecuencias por momentos eternas- se trasladó a la línea B.

Ayer por la tarde, decenas de personas protagonizaron una evacuación por las vías cuando una formación se detuvo entre las estaciones Malabia y Angel Gallardo. A las 17.45, el subte quedó parado y se dio intervención al servicio técnico. Para las 18.20 se tomó la decisión de suspender el servicio, debido a que no fue posible mover el tren. A las 18.40 se inició la evacuación, que finalizó a las 19.23.

Todo este proceso de casi dos horas fue compartido en redes sociales. Además el SAME, los bomberos y los organismos de emergencias de la Ciudad montaron un dispositivo impresionante de móviles en las inmediaciones de la estación Malabia, en Villa Crespo.

Como siempre que ocurren estos hechos, las problemas y las deficiencias del servicio quedan en evidencia. En cuanto al hecho puntual, la empresa que gestiona el servicio de subterráneos porteños informó que se trató «una falla eléctrica de difícil detección. A modo de protección, para la seguridad de los usuarios, el sistema del tren aplica automáticamente una emergencia general que lo detiene», explicaron desde Emova.

«Hay que entender que la línea B tiene una complejidad muy importante que es el tercer riel, la alimentación de electricidad, situada a un lado de las vías. No hay manera de iniciar una evacuación sin cortar la luz. Por otra parte, los vagones no están comunicados entre sí -es decir, no se puede pasar de uno a otro como sí ocurre en las líneas con formaciones más modernas- y esto también dificulta la evacuación», agregaron.

«La intención no es interrumpir el servicio. Los mecánicos intentan hacer todas las maniobras posibles para restablecer el funcionamiento. Lo último es la evacuación», aseguraron.

Si bien desde Emova buscan ponerle paños fríos a lo ocurrido este lunes -«lamentablemente se está mezclando todo, son demoras puntuales que no afectan a toda la red»-, lo cierto es que confluyen varios factores que hacen que la experiencia de viajar en subte, sobre todo en las líneas B y D, sea muchas veces un dolor de cabeza.

En la B, es notoria la antigüedad del material rodante. En otras, con la A, la H, la C y la D, las formaciones son nuevas. Los trenes Mitsubishi de la B, por ejemplo, tienen 65 años. Son los que se alimentan por el tercer riel. Fueron adquiridos a Japón en los 90, una vez que salieron de servicio y después de dos décadas de uso en aquel país.

Algo similar pasó con los CAF 5.000 y 6.000, del metro de Madrid, construidos a fines de los 90. Los primeros fueron retirados cuando se comprobó que tenían asbesto. Los más nuevos, aún en servicio, atraviesan un proceso de desasbestizado que ya lleva más de cinco años. Toman la corriente de una catenaria instalada en los techos de los túneles. Ahora, la flota tiene 18 trenes operativos, según Emova.

Desde Sbase, la empresa estatal porteña, confirmaron que hay una licitación internacional en curso para la compra de 96 coches cero kilómetro y con aire acondicionado. Lo que no se sabe es cuándo comenzarán a llegar las nuevas formaciones.

Otro escollo para quienes usan esta línea es muchas veces se da en escaleras y ascensores fuera de servicio. Un clásico de la red en general y que se atribuye por un lado a la antigüedad de los equipos y por otro a la dificultad para conseguir repuestos.

La B tiene 59 escaleras y 19 ascensores. «Las escaleras y ascensores cuentan con mecanismos muy delicados que reciben un uso intensivo y muchas veces están expuestas a hechos de vandalismo. Los tiempos de reparación varían según el tipo de avería y la necesidad de repuestos, que suelen ser importados», dijeron desde la empresa. Emova publica en su web el estado de los medios de elevación de cada estación. Hoy había 7 escaleras y 5 ascensores detenidos.

Por otro lado, la B es también la línea más extensa de la red y la que más usuarios traslada, si bien en los últimos años se ha dado una merma en el uso de la red. Para tener una idea: entre diciembre de 2019 y diciembre de 2023 hubo 6.313.404 de pasajeros menos (de 26.127.228 a 19.813.824 de usuarios).

En el caso particular de la línea B, pasó de tener 6.702.066 pasajeros en diciembre de 2019 a 4.806.154 en diciembre de 2023. Casi 1.900.000 menos. Emova tiene 4.800 empleados, de los cuales 700 están destinado a la línea B. Por el efecto de la pandemia, toda la red tiene un 70% de los pasajeros que movilizaba previo a marzo de 2020.

Siguen las quejas por la línea D

Aunque estuvo cerrada durante el verano, y desde que reabrió sigue con demoras y problemas de en la frecuencia, la línea D sigue siendo objeto de quejas de los pasajeros.

Tanto Emova como Sbase informaron que se encuentran trabajando para poder terminar los ajustes propios de la implementación de este tipo de sistema, «que es muy complejo y que sólo se pueden detectar durante la operación».

«Una vez finalizados, la línea ofrecerá un servicio más rápido, eficiente y regular, tal como sucede con la Línea H, una de las líneas con mejores estándares de performance de la red», explicaron.

La empresa Siemens se encuentra actualizando un software para adecuar la línea y esto genera restricciones de velocidad en zona de andenes y en los ingresos a las cabeceras. El nuevo sistema, conocido como CBTC, trabaja mediante la comunicación entre formaciones, «permitiendo el máximo acercamiento de forma segura y reduciendo el intervalo al mínimo posible», explicaron desde el Gobierno porteño.

Como contó Clarín hace semanas, antes del cierre de dos meses, de lunes a viernes, la línea operaba con una frecuencia de 3 minutos y un recorrido de unos 26 minutos entre cabeceras. Ahora pueden pasar entre 10 y 15 minutos entre trenes, y por las paradas repentinas en medio de los túneles, el viaje entre Catedral y Congreso de Tucuman puede tardar hasta 38 minutos. Los carteles que indican cuándo viene el próximo tren siguen apagados.

Desde Sbase aseguran que la frecuencia actual es de 5 minutos entre trenes aunque todavía se están haciendo ajustes que pueden generar demoras,

Aumento inminente

En los próximos días se concretará una aumento de tarifas que llevará el boleto a $ 757 en junio. La semana pasada se hicieron las audiencias públicas y aún resta la publicación en el Boletín Oficial, por lo que el primer incremento, que llevará cada viaje a $ 574, se aplicará en unos diez días. Luego, cuando se aplique el segundo tramo, 15 días después, lo llevará a $ 667, y el tercer tramo se concretará alrededor del 10 de junio.

El argumento del Gobierno porteño es que los $ 125 actuales no reflejan los costos reales de prestación del servicio y quedaron desactualizados con respecto a la inflación. Agregan que la tarifa técnica, que surge del cálculo del costo del servicio por la cantidad de usuarios transportados, es de $ 859,07. La diferencia se cubre con subsidios.

FALLO HISTÓRICO: PRIMERA CONDENA POR CRUELDAD ANIMAL EN LA CIUDAD DE BUENOS AIRES

El Ministerio Público Fiscal de la Ciudad logró la primera condena a través de un juicio oral y público para el responsable de un criadero clandestino por actos de crueldad animal.

El caso fue investigado y elevado a juicio por la Unidad Fiscal Especializada en Materia Ambiental (UFEMA), a cargo del fiscal Carlos Rolero Santurián.

La causa se había iniciado en 2022 por la denuncia de un vecino y luego de las averiguaciones preliminares, el fiscal solicitó el allanamiento del domicilio ubicado sobre la calle Viamonte al 1600.

En el procedimiento se encontraron 17 perros, entre ellos 3 cachorros, en situación de extrema vulnerabilidad dado que estaban en condiciones higiénicas deplorables, rodeados de excrementos, sin luz ni ventilación natural, enjaulados, sin libre acceso a agua potable, mal alimentados y sin controles veterinarios al día.

A partir de los elementos encontrados, la UFEMA pudo determinar que el lugar funcionaba como criadero ilegal, en el que las hembras eran obligadas a parir sistemáticamente para vender a sus crías, lo que está calificado como acto de crueldad y maltrato animal.

En aquel momento, los animales rescatados fueron acogidos por las ONGs Calljeros casa quiere, Red 4 patas y Ayudacan, para luego ser entregados en adopción responsable.

Finalmente, luego de un juicio oral y público que duró 2 jornadas, la Jueza Karina Andrade, titular del Juzgado PCyF 15, condenó al imputado a 8 meses de prisión en suspenso y al cumplimiento de ciertas pautas de conducta por el plazo de 2 años. Algunas de dichas pautas son asistir al Programa Protenencia, dependiente del Ministerio de Salud, realizar una capacitación del Observatorio del “Vínculo Humano-Animal” de Argentina en la Universidad Nacional Arturo Jauretche, fijar residencia y acudir a todas las citaciones de la justicia.

Asimismo, la importancia del caso radica en que la jueza declaró a los perros como sujetos de derechos y dispuso la tenencia definitiva de cada uno dentro del núcleo familiar interespecie dentro del cual se encuentran en la actualidad.

Se trata de la primera vez que justicia porteña logra una condena por actos de maltrato y crueldad animal vinculados con la tenencia de criaderos ilegales

Se demora el fuerte aumento del subte, pero luego será más seguido: cuánto costará y desde cuándo

  • La audiencia pública se suspendió por problemas técnicos y se retrasó el tarifazo.
  • Se repartirá en tres tramos.

La suba del boleto subte se aplicará en tres tramos, como se había anunciado. Pero a esos tres escalones habrá que subirlos más rápido que lo que se había informado. El Gobierno porteño confirmó que el primer aumento no será en abril sino en mayo, pero también adelantó que los otros dos tramos no correrán con un mes de diferencia sino a los 15 días.

Este esquema es el que surge de la resolución impulsada por Subterráneos de Buenos Aires (SBASE), que se publicó este miércoles en el Boletín Oficial de la Ciudad. Y viene a subsanar un problema con la audiencia pública obligatoria en la que se quiso presentar el nuevo cuadro tarifario.

Para entender qué cambió, hay que recordar qué se había informado. En febrero se aplicó el último aumento del subte, que llevó el boleto base a los $ 125 que se pagan ahora.

Pero a mediados de febrero la Ciudad confirmó que iba a impulsar un nuevo incremento. Es que, según SBASE, la inflación había llevado a que el costo operativo hubiera crecido mucho. Así, la tarifa técnica está ahora en $ 859,07.

Se llama tarifa técnica al resultado que se obtiene al dividir el costo operativo total del servicio por la cantidad de boletos pagos. Es, en definitiva, lo que debería costar cada viaje si no se compensara una parte con subsidios.

Como la idea es reducir en parte ese subsidio, se anunció un aumento escalonado en tres etapas. Para abril, el boleto se iría de los $ 125 actuales a $ 574. Luego, en mayo se iba a aplicar un segundo tramo para dejar la tarifa en $ 667. Finalmente, en junio se pasaría a $ 757 por viaje.

Siempre, manteniendo el sistema de descuentos para quienes viajen, 20, 30 o 40 veces por mes; y también los beneficios como el pase gratuito para jubilados o estudiantes, entre otros.

Como sucede con cualquier modificación de la tarifa de un servicio público, antes de aplicarla hay que convocar a una audiencia pública. Si bien este encuentro no es vinculante, sí es obligatorio. De hecho, el requisito también corre a nivel nacional.

Esa audiencia se iba a realizar el pasado viernes 15, a través de la plataforma Zoom. Pero hubo un imprevisto: se cayó el sistema. Como la transmisión online no se pudo completar, y entonces no quedó garantizado el derecho a la participación ciudadana, el paso obligatorio de la audiencia no se pudo cumplir y hubo que convocar a una nueva fecha.

Esa audiencia se realizará el 25 de abril, según se publicó ahora en el Boletín Oficial.

En la misma convocatoria se estableció que el primer aumento se aplicará «al 5° día» de publicada la resolución que lo autorice.

Luego agrega que el segundo tramo de aumento, el que llevará el boleto a $ 667, empezará a regir «a los 15 días corridos».

Por último, el tercer escalón, que llevará la tarifa a $ 757, llegará «a los 15 días corridos» del segundo aumento.

¿Qué días sucederá esto? No hay una fecha precisa, pero se estima que el primer aumento correría desde mediados de mayo. Así, el segundo entraría para los últimos días de mes, y el tercero para mediados de junio.

A mitad de año, entonces, el subte completaría su aumento de los $ 125 actuales a $ 757. O sea, un salto total de 505%.

Fuente Clarin

“Vamos a seguir trabajando para posicionar las experiencias que ofrecemos”

La ciudad de Buenos Aires fue elegida como uno de los mejores destinos turisticos de América del Sur

El premio fue entregado en el marco de la ceremonia de los Premios Traveller’s Choice en Colombia, evento organizado por la agencia de viajes en línea TripAdvisor. El jefe de Gobierno porteño, Jorge Macri, celebró la distinción con un posteo en redes sociales.

“Buenos Aires fue premiada como Mejor destino de América del Sur en los premios Traveller’s ChoiceEste reconocimiento está basado en los comentarios de millones de usuarios, quienes la eligieron por la increíble oferta cultural, la gastronomía de nivel internacional y la calidad de los servicios turísticos”, destacó en X. Y cerró: “Vamos a seguir trabajando para posicionar las experiencias que ofrecemos y continuar ocupando un lugar destacado para los viajeros de todo el mundo”.

“La cuna del tango es, como la danza en sí, cautivante, seductora y bulliciosa con vibrante energía. Los antiguos barrios evocadores están repletos de restaurantes románticos y emocionante vida nocturna, y la herencia europea es evidente en la arquitectura de Buenos Aires, en sus bulevares y en sus parques. El Café Tortoni, el bar más antiguo de la ciudad, te transportará a 1858, y el sensacional Teatro Colón sigue causando el mismo efecto en el espectador que en 1908. La capital de las compras de Latinoamérica ofrece la promesa de una lujosa terapia de compras por sus amplios bulevares”, destaca TripAdvisor sobre Buenos Aires en su sitio web.

Aumenta el boleto de colectivos: a cuánto se irá en febrero y cuándo se normalizará el servicio tras las protestas

El boleto mínimo de colectivos aumentará a $ 76,92 a partir del lunes. La noticia se conoció el jueves por la tarde, tras la reunión de autoridades del gobierno nacional con representantes de las cámaras de empresas de colectivos. El encuentro sirvió para comenzar a destrabar el conflicto que inició el sábado, con el recorte de hasta el 50% de las frecuencias, en reclamo del aumento de fondos que el Estado destina en concepto de subsidios.

En la calle todavía se sienten las demoras, con esperas que a veces superan los 40 minutos, cuando lo habitual era aguardar no más de 15. Se trata del último día hábil del año. Durante el fin de semana se espera un escenario similar al de hace siete días, cuando comenzó la protesta y no se sintió tanto por el feriado de Navidad.

«Primer paso mínimo a $ 77 (son los ajustes que estaban previstos y se suspendieron en agosto). Segundo paso febrero, post audiencia pública, llevar el boleto a un valor cercano a lo que se cobra en Córdoba o Rosario (grandes centros urbanos de argentina)», dijeron desde la Asociación Argentina del Transporte Automotor ( AAETA), y agregaron: «Y en paralelo sincerar el costo haciendo los cálculos con los precios de hoy de los insumos (que da 800 pesos por usuario). La diferencia entre tarifa y costo (bien calculado) se seguirá pagando con subsidios, ya que su camino de eliminación es mucho mas largo. Tres años, según dijo el ministro Caputo».

En febrero, entonces, los boletos en el AMBA podrían irse a $ 200 en promedio. Si como se dice el objetivo es equipararlos con Córdoba y Rosario, en la provincia mediterránea, por ejemplo, la tarifa arranca en $ 240 ($ 276 la nocturna) en los servicios más usados. Pero también hay servicios de $ 276 y hasta de $ 960 en el caso del Aerobus, que une el aeropuerto con en centro de la ciudad Capital. En Rosario, en tanto, la tarifa básica cuesta $ 240, mientras que la social sale $ 107.

Desde el lunes, el mínimo, que comprende tramos de entre 0 y 3 kilómetros de distancia, constará 76,92. Luego, para viajes de 3 a 6 kilómetros, los más comunes dentro de la Ciudad, habrá que pagar $ 85,69. El boletó saldrá 92,29 para tramos de 6 a 12 km, 98,90 de 12 a 27; y $ 105,46 si el viaje tiene más de 27 kilómetros.

Para quienes tengan la tarifa social, los valores arrancan en $ 34,61 para el boleto mínimo, y van escalando en $ 38,56; $ 51,53; $ 44,51 y $ 47,56 según las distancias.

Tanto las tarifas como los fondos que aporta el Gobierno Nacional están congelados desde agosto, por decisión del entonces ministro de Economía y candidato presidencial Sergio Massa, en plena campaña. Hasta ese momento se había dispuesto un aumento mensual según el Índice de Precios al Consumidor (IPC).

El reclamo de las empresas tenía que ver con que habían padecido aumentos inflacionarios de costos, salarios y combustibles, pero no de los aportes en materia de subsidios.

«En la reunión, que fue muy positiva, se reconoció el problema de desfinanciamiento, ya que se está trabajando con los fondos del mes de agosto, mientras que la inflación duplicó el precio de muchos insumos. Se va actualizar la base de cálculo, que va a impactar en los subsidios, y se va a reiniciar el programa de reajuste tarifario que se había interrumpido en agosto», dijo Luciano Fusaro, vicepresidente AAETA, y agregó: «La suba que se aplicará desde la semana que viene está explicada en los aumentos que no se hicieron efectivos en estos meses, desde septiembre hasta ahora».

Fusaro también explicó que a mitad de enero se hará la audiencia pública que definirá el aumento de febrero. Además, reafirmó el objetivo de equiparar el boleto del AMBA con Córdoba y Rosario. «La idea es eliminar esa asimetría que hay con esos dos grandes centros urbanos, en donde el mínimo es de $ 240. El camino a mediano y largo plazo es reducir subsidios. Pero si lo quitaran ahora, el boleto promedio se iría a $ 800. El porcentaje de la tarifa que se subsidia ahora es del 90% y eso se iría achicando en un proceso de 3 años que terminaría con la quita total».

De la reunión también surgió que se mantendrán los descuentos de la red SUBE, que hace que el segundo viaje se pague al 50% del valor y del tercero solo el 25%. Siempre y cuando se inicien los traslados dentro de las dos horas de comenzado el primero.

Además, del encuentro surgió que se implementarán nuevas formas de aplicar los descuentos por tarifa social para, de una vez por todas, «subsidiar a los pasajeros» y no directamente a las empresas de colectivos.

Por otra parte, otra tarifa que quedó congelada desde agosto es la de los trenes, que gestiona el Estado. Este viernes por la tarde se confirmó que desde el 15 de enero tambien un 45,32% las tarifas.

El único barrio porteño sin una plaza, más cerca de cumplir su viejo sueño

La Ciudad compró el lote que se destinará al primer espacio verde de la zona, un reclamo vecinal que lleva décadas. Cuál es y dónde queda.

El viejo anhelo para que Villa Santa Rita tenga por fin su plaza dio uno de sus pasos más importantes. El Gobierno porteño compró el terreno donde se instalará el espacio verde

Se trata del único de los 48 barrios oficiales de la Ciudad que no tiene ninguna plaza. Por eso, desde hace décadas los vecinos venían reclamando una.

Según confirmaron en la Secretaría de Desarrollo Urbano, el Estado porteño le pagó al dueño del lote 450 millones de pesos, precio que había definido una tasación realizada por el Banco Ciudad. Ahora avanzarán con los últimos trámites para comenzar con la obra «en las próximas semanas».

Dado que no es una obra muy compleja, se espera que en los primeros meses del año que viene los vecinos ya tengan su placita.

La ley para crear esta plaza había sido votada a mitad de año por unanimidad.

El predio elegido queda en Álvarez Jonte 3222, y su superficie es de 1.600 m2. Se trata de un lote donde antiguamente funcionaba un lavadero de autos, que luego fue adquirido para la construcción de un edificio.

Pero en 2011, la Legislatura porteña redujo la altura máxima permitida en la zona, sobre todo para proteger al pasaje Granville, que está en la misma manzana. Desde hace muchos años, entonces, el predio no tiene uso.

Por eso, los vecinos vieron allí la oportunidad que perseguían desde hacía 40 años: que el terreno pasara a manos de la Ciudad y se lo destinara a la instalación de la primera plaza en un barrio con 2,2 kilómetros cuadrados de superficie y más de 35.000 habitantes.

Esa lucha derivó en la ley y en la actual compra de parte del Estado. Por eso, este viernes a las 18 se juntarán en el lugar para celebrar. En un comunicado que difundieron, expresaron «alegría y satisfacción por este logro 100% vecinal”, pero también expresaron su “preocupación por las demoras que podrían acontecer respecto a la construcción de la plaza”. La referencia tiene que ver con ciertos cambios en el diseño que se había consensuado entre los vecinos y la Ciudad. De todas formas, en Desarrollo Urbano sostienen que la obra comenzará dentro de poco.

El dinero para comprar y construir la plaza saldrá del FODUS, el Fondo de Desarrollo Urbano Sustentable. Es una herramienta que se creó por ley hace dos años, y que se nutre de dos fuentes de financiamiento, ambas de la construcción privada.

Una es lo que se cobra en concepto de “plusvalía urbana”. Es un tributo que se creó después de la reforma del Código Urbanístico de la Ciudad, en 2018. Lo pagan aquellos desarrolladores que se ven beneficiados por la posibilidad de construir más metros cuadrados gracias a esos cambios en la normativa.

La otra fuente son los convenios urbanísticos. Se trata de acuerdos que el Gobierno porteño firma con desarrolladores privados, por los cuales los inversores solicitan que les permitan construir más metros en altura o más volumen que lo que establece el Código para esa zona, y a cambio compensan al Estado con dinero. Cada convenio debe ser luego aprobado por la Legislatura porteña.

«El primer éxito fue el de trabajar juntos con los vecinos para resolver los problemas que nos plantean, con innovación y creatividad. El segundo es hacer de esto una política pública, por eso la creación de FODUS nos da la posibilidad de que estos casos no sean casos aislados”, aseguró Álvaro García Resta, secretario de Desarrollo Urbano de la Ciudad.

La falta de plazas y parques es un reclamo sistemático de los porteños, en todos los barrios. Pese a la carencia de terrenos libres, en los últimos años pudieron concretarse algunas iniciativas para sumar espacios verdes. Y en todos fue clave la lucha de los vecinos.

Acaso el ejemplo más gráfico sea el de la Manzana 66. Se trata del lote que queda entre Jujuy, Belgrano, Catamarca y Moreno, en Balvanera. Allí, una empresa compró todas las parcelas para construir un microestadio.

Pero los vecinos se oponían, pedían una plaza. La sostenida presión de la gente consiguió que la Ciudad y la empresa firmara un convenio urbanístico por el cual el privado cedía el terreno a cambio de otro, en Saavedra, donde le permitirían levantar un edificio. A cambio, el Estado se quedaba con la Manzana 66 para hacer la plaza, obra que finalmente fue inaugurada en 2018.

Otro antecedente es el de Boedo, barrio que durante décadas tampoco tuvo ni una plaza. En 2011 fue inaugurada la primera, en Estados Unidos, Sánchez de Loria, Carlos Calvo y Virrey Liniers.

Fuente Clarin

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La Ciudad compró el lote que se destinará al primer espacio verde de la zona, un reclamo vecinal que lleva décadas. Cuál es y dónde queda.

El viejo anhelo para que Villa Santa Rita tenga por fin su plaza dio uno de sus pasos más importantes. El Gobierno porteño compró el terreno donde se instalará el espacio verde

Se trata del único de los 48 barrios oficiales de la Ciudad que no tiene ninguna plaza. Por eso, desde hace décadas los vecinos venían reclamando una.

Según confirmaron en la Secretaría de Desarrollo Urbano, el Estado porteño le pagó al dueño del lote 450 millones de pesos, precio que había definido una tasación realizada por el Banco Ciudad. Ahora avanzarán con los últimos trámites para comenzar con la obra «en las próximas semanas».

Dado que no es una obra muy compleja, se espera que en los primeros meses del año que viene los vecinos ya tengan su placita.

La ley para crear esta plaza había sido votada a mitad de año por unanimidad.

El predio elegido queda en Álvarez Jonte 3222, y su superficie es de 1.600 m2. Se trata de un lote donde antiguamente funcionaba un lavadero de autos, que luego fue adquirido para la construcción de un edificio.

Pero en 2011, la Legislatura porteña redujo la altura máxima permitida en la zona, sobre todo para proteger al pasaje Granville, que está en la misma manzana. Desde hace muchos años, entonces, el predio no tiene uso.

Por eso, los vecinos vieron allí la oportunidad que perseguían desde hacía 40 años: que el terreno pasara a manos de la Ciudad y se lo destinara a la instalación de la primera plaza en un barrio con 2,2 kilómetros cuadrados de superficie y más de 35.000 habitantes.

Esa lucha derivó en la ley y en la actual compra de parte del Estado. Por eso, este viernes a las 18 se juntarán en el lugar para celebrar. En un comunicado que difundieron, expresaron «alegría y satisfacción por este logro 100% vecinal”, pero también expresaron su “preocupación por las demoras que podrían acontecer respecto a la construcción de la plaza”. La referencia tiene que ver con ciertos cambios en el diseño que se había consensuado entre los vecinos y la Ciudad. De todas formas, en Desarrollo Urbano sostienen que la obra comenzará dentro de poco.

El dinero para comprar y construir la plaza saldrá del FODUS, el Fondo de Desarrollo Urbano Sustentable. Es una herramienta que se creó por ley hace dos años, y que se nutre de dos fuentes de financiamiento, ambas de la construcción privada.

Una es lo que se cobra en concepto de “plusvalía urbana”. Es un tributo que se creó después de la reforma del Código Urbanístico de la Ciudad, en 2018. Lo pagan aquellos desarrolladores que se ven beneficiados por la posibilidad de construir más metros cuadrados gracias a esos cambios en la normativa.

La otra fuente son los convenios urbanísticos. Se trata de acuerdos que el Gobierno porteño firma con desarrolladores privados, por los cuales los inversores solicitan que les permitan construir más metros en altura o más volumen que lo que establece el Código para esa zona, y a cambio compensan al Estado con dinero. Cada convenio debe ser luego aprobado por la Legislatura porteña.

«El primer éxito fue el de trabajar juntos con los vecinos para resolver los problemas que nos plantean, con innovación y creatividad. El segundo es hacer de esto una política pública, por eso la creación de FODUS nos da la posibilidad de que estos casos no sean casos aislados”, aseguró Álvaro García Resta, secretario de Desarrollo Urbano de la Ciudad.

La falta de plazas y parques es un reclamo sistemático de los porteños, en todos los barrios. Pese a la carencia de terrenos libres, en los últimos años pudieron concretarse algunas iniciativas para sumar espacios verdes. Y en todos fue clave la lucha de los vecinos.

Acaso el ejemplo más gráfico sea el de la Manzana 66. Se trata del lote que queda entre Jujuy, Belgrano, Catamarca y Moreno, en Balvanera. Allí, una empresa compró todas las parcelas para construir un microestadio.

Pero los vecinos se oponían, pedían una plaza. La sostenida presión de la gente consiguió que la Ciudad y la empresa firmara un convenio urbanístico por el cual el privado cedía el terreno a cambio de otro, en Saavedra, donde le permitirían levantar un edificio. A cambio, el Estado se quedaba con la Manzana 66 para hacer la plaza, obra que finalmente fue inaugurada en 2018.

Otro antecedente es el de Boedo, barrio que durante décadas tampoco tuvo ni una plaza. En 2011 fue inaugurada la primera, en Estados Unidos, Sánchez de Loria, Carlos Calvo y Virrey Liniers.

Fuente: Clarin